Su pedido está vacío

Novedades

SÍNDROME DE CUSHING EN PERROS.

 

(También conocido como hiperadrenocorticismo)

 

El Síndrome de Cushing es una enfermedad hormonal que se presenta cuando el cuerpo del perro produce demasiado cortisol, una hormona fabricada por las glándulas suprarrenales.

 

El cortisol es necesario para controlar el metabolismo, la presión arterial y la respuesta al estrés, pero en exceso causa múltiples alteraciones en todo el organismo.

¿Por qué se produce?
 

Todo parte del eje -hipotálamo–hipófisis–suprarrenal, esto es como un circuito que controla la producción de cortisol.

Cuando este sistema se descontrola, las glándulas suprarrenales producen más hormona de la necesaria.

Donde se encuentran:
1. Hipotálamo ? cerebro.
2. Hipófisis (o glándula pituitaria) ? está justo debajo del hipotálamo.
3. Glándulas suprarrenales ? están encima de los riñones.

Las causas más comunes son tres:

1. Cushing hipofisario: (la más frecuente) Un pequeño tumor en la hipófisis produce demasiada ACTH, lo que hace que las suprarrenales fabriquen más cortisol.

En este tipo de Cushing, el problema empieza en el cerebro, específicamente en la hipófisis (o glándula pituitaria).

Esta glándula normalmente produce una hormona llamada ACTH. La ACTH es como una “orden” que le dice a las glándulas suprarrenales que fabriquen cortisol, una hormona del estrés que el cuerpo necesita para funcionar.

¿Qué pasa en el Cushing hipofisario?
Ocurre que la hipófisis desarrolla un pequeño tumor benigno (adenoma).
Este tumor no obedece las órdenes del cuerpo y empieza a producir demasiada ACTH, aunque ya haya suficiente cortisol circulando.

Entonces sucede lo siguiente:
. La hipófisis “grita” demasiado ACTH.
. Las suprarrenales, al recibir esa señal exagerada, trabajan sin parar.
. Como resultado, liberan grandes cantidades de cortisol a la sangre.

La siguiente causa es también por:
2.Cushing suprarrenal (por tumor en la glándula suprarrenal)
En este tipo de Cushing, el problema no está en el cerebro, sino en una de las glándulas suprarrenales.

¿Qué ocurre aquí?
Una de las suprarrenales desarrolla un tumor, que puede ser:

-Benigno (adenoma) o
-Maligno (carcinoma)

Y este tumor empieza a producir cortisol por su cuenta, sin esperar órdenes de la hipófisis ni del hipotálamo.

En condiciones normales:
El cerebro (hipófisis) libera ACTH para decirle a las suprarrenales cuánta cantidad de cortisol fabricar.

Pero cuando hay un tumor suprarrenal, la glándula se vuelve independiente, no necesita ACTH y produce cortisol todo el tiempo, aunque el cuerpo ya tenga de sobra.

¿Qué pasa con la otra glándula suprarrenal?
Como el cuerpo ya tiene demasiado cortisol, el cerebro deja de producir ACTH (porque detecta el exceso).
Entonces, la otra glándula suprarrenal sana deja de trabajar y se atrofia (se encoge).
Solo la del tumor sigue activa, funcionando sin control.

Resultado
Hay exceso de cortisol en la sangre, lo que causa los mismos signos clínicos del Cushing hipofisario:

3. Cushing iatrogénico: Por uso prolongado de corticoides (como prednisolona o dexametasona), lo que altera la regulación natural del eje hormonal.
Cuando administramos corticoides externos (medicamentos), el organismo los interpreta como si ya tuviera suficiente cortisol.

Entonces ocurre esto:

. El hipotálamo deja de liberar CRH.
. La hipófisis deja de producir ACTH.
. Las glándulas suprarrenales “se apagan” y dejan de fabricar cortisol.
Con el tiempo, incluso se atrofian (se encogen).

El resultado es que el perro depende completamente del corticoide que se le administra, y su cuerpo pierde la capacidad de producir cortisol por sí mismo.

Qué pasa si se suspende bruscamente el corticoide

Si se corta el tratamiento de golpe, el cuerpo no puede reaccionar al estrés, porque las suprarrenales están “dormidas”.

Esto puede causar una crisis adrenal aguda, con colapso, vómitos, hipotensión y hasta la muerte.

Por eso los corticoides siempre deben retirarse de forma gradual, disminuyendo la dosis poco a poco.

¿Qué efectos tiene el exceso de cortisol?

El cortisol alto afecta casi todos los sistemas del cuerpo.
Por eso los perros con Cushing presentan signos muy característicos:

-Beben y orinan mucho.
-Comen demasiado (polifagia).
-Tienen el abdomen redondeado o “vientre de barril”.
-Pierden pelo de forma simétrica en los flancos.
-Su piel se vuelve delgada, seca y con mala cicatrización.
-Están más débiles y cansados por pérdida de masa muscular.
-Pueden desarrollar infecciones cutáneas o urinarias recurrentes.
-En casos avanzados, muestran cambios neurológicos si hay un tumor grande en la hipófisis.

¿Cómo se diagnostica?

Si se sospecha del síndrome por los signos clínicos y los resultados de laboratorio:
aumento de enzimas hepáticas, glucosa alta y baja densidad urinaria.
Para confirmar se usan pruebas hormonales específicas como:

-Prueba de supresión con dexametasona.
-Prueba de estimulación con ACTH.

También se puede hacer ecografía abdominal o tomografía para ver las glándulas suprarrenales o el tumor hipofisario.

 

Tratamiento

Depende del tipo de Cushing:

En el hipofisario, se utiliza Trilostano (Vetoryl®), que reduce la producción de cortisol.
? Dosis habitual: entre 2 y 5 mg/kg al día, siempre con control y pruebas de seguimiento.
En el suprarrenal, si hay tumor, lo ideal es la cirugía (adrenalectomía).

En el iatrogénico, se debe reducir poco a poco el uso de corticoides hasta suspenderlos, nunca de golpe.

Seguimiento

El tratamiento no cura la enfermedad, pero controla los síntomas y mejora la calidad de vida.
El perro necesita controles veterinarios regulares para ajustar la dosis y evitar efectos secundarios.
Con un manejo adecuado, muchos perros viven varios años con buena calidad de vida.


Pronóstico
Bueno con tratamiento y monitoreo adecuado. Requiere control hormonal cada 3–6 meses y ajustes de dosis.
Sin tratamiento, puede generar diabetes, infecciones urinarias recurrentes, hipertensión y tromboembolismos.

Razas propensas a la enfermedad de Cushing

Hay razas de perros que son más propensas a padecer el síndrome de Cushing dependiendo del origen del mal funcionamiento de las hormonas o la posible aparición de tumores que afecten a los niveles de cortisol.

Origen en las glándulas adrenales
- Yorkshire terrier
- Teckel
- Caniche enano
- Pastor Alemán

Además, el mal funcionamiento de estas glándulas es más frecuente en perros adultos, entre los 6 y 10 años, que en perros jóvenes o cachorros.

Origen en la hipófisis
- Teckel
- Caniche
- Boston terrier
- Schnauzer pequeño
- Bichón Maltés
- Bobtail

Origen iatrogénico
- Bóxer
- Pastor de los Pirineos
- Labrador retriever
- Caniche
 

 
Contactate con tu vendedor por precios y condiciones, o al 08008575.

Dirección: Isla de Gaspar 2282
Tel.: 0800 8575
WhatsApp: 092 567 486 / 099 942 171 
Mail: admvtas@deribal.com.uy

Horario: Lun a Vie de 9 a 12 y 12:30 a 17hrs.

JooMix